Fuente Clarín. Suplemento Rural, Sábado 04 de julio de 2015
Hugo Ghio, productor cordobés y pionero de la siembra directa en la Argentina, plantea que no es sustentable una utilización mínimo de fertilizantes: Hay que seguir apostando a la producción sustentable. Es lo que piensa Hugo Ghio, un productor referente del sudeste cordobés y uno de los socios fundadores de Aapresid. El productor sostiene que «no podemos mantener un modelo de producción sustentable basado en el mínimo uso de fertilizantes; es necesario poner foco en la potencialidad del ambiente y en el aporte adecuado de insumos, especialmente los nutrientes, para que éste pueda expresar todo su potencial». Ghío agregó, durante su disertación en el reciente congreso de Fertilizar en Rosario, que cuando se trabaja para una agricultura sustentable, se piensa en una agricultura que no degrade, que no contamine, que considere la inclusión y el desarrollo social y que preserve los recursos naturales, con los disturbios mínimos propios de la actividad. En cuanto a por qué la Argentina no repone los nutrientes que consume, Ghio citó causas económicas y culturales. Entre las primeras mencionó la relación insumo/producto, ya que los precios internos de los granos desvirtúan las relaciones internacionales. Y entre las segundas citó cuestiones históricas, como el hecho de que la agricultura se hizo aquí, históricamente, sobre suelos extremadamente fértiles. También dijo que Argentina tiene una formación académica sostenida fuertemente, a lo largo del tiempo, sobre la producción mixta (agricultura-pradera). Ghio explicó su experiencia personal como productor. Señaló que «pensando en una agricultura sustentable, en función de los niveles de fósforo en el suelo, planteamos un cambio en la estrategia de fertilización para todos los cultivos, como forma de maximizar productividad». Finalmente, consideró que «tranqueras adentro, el propietario de la tierra es el principal responsable del cuidado de su bien principal, el suelo, y por lo tanto todas las acciones que realice, de forma directa o a través de terceros». Además, opinó que «tranqueras afuera, mantener la fertilidad y productividad del recurso suelo debe ser una política de Estado, con incentivos hacia quienes la practican y de fuerte imposición fiscal para quienes no la realicen».